Las suculentas son plantas populares por su belleza y fácil mantenimiento. Para cuidarlas correctamente, sigue estos consejos básicos: Ubícalas en un lugar con luz indirecta o directa dependiendo de la especie. Riégalas con moderación, permitiendo que el sustrato se seque completamente entre riegos. Usa una maceta con buen drenaje para evitar el exceso de humedad, ya que sus raíces son propensas a pudrirse. Además, abónalas ocasionalmente con un fertilizante suave para suculentas y retira las hojas secas para mantenerlas sanas.